Un día dirás, esa mujer que va allí me amó como ninguna,
esa que va de mano con ese hombre y no busca la mirada mía,
y pedirás al cielo que recuerde, que algún día estuve en tu vida,
pero ya serás ayer, por jugar con el amor que yo te tenia.
Y querrás que volteé, para ver tus ojos negros,
esos que esperé días y días con sus noches,
para ver reflejados nuevamente en los míos,
pero ya será tarde, porque no habrá reproches,
por el amor que soñaba y solo era recortes.
Me verás como una mujer feliz y sonriente,
porque serás río del adiós, con corriente,
que se llevó entre sus aguas, ese amor mendigo,
y me regresó un nuevo amor, que será tu castigo.
Algún día dirás, esa mujer que va allí no tiene recuerdos,
me amó como ninguna, en las noches de luna,
y es tan fría, que parece que han muerto sus sentidos,
porque se ve lejana y distante como ahora veo la luna.
Y pensarás al verme feliz con otro, ¡ la amo todavía !
pero que tarde me di cuenta, del amor que le tenía,
y hoy pasa a mi lado como pasajera de un tranvía,
que se acerca a la ventana y su mirada es de lejanía.
© Emely
1 comentario:
hola emely,precioso tu poema,voy a publicarlo en mi facebook,te mando un abrazo.
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