Una suave brisa, son tus besos,que cubren mi piel, de melodías,
y tu deliciosa boca, son mis versos,
que inspiran mi alma, todos los días.
Alma que estaba sola, con sus penas,
que gritaba, vida mía, yo soy buena,
borrame el dolor, de mis tristezas,
y limpia mi alma, con tu faena.
Mi alma hoy ríe, con alegría,
llegó el día, de su suerte,
no importa el sabor, que tenia,
porque el de hoy, no es de muerte.
Es el día del renacer,
donde dos almas, se encuentran,
y en el amor, vuelven a creer,
entre látidos y miradas, se enamoran.
Es el renacimiento, del amor,
que creían muerto, por el dolor,
pero el amor, solo estaba inerte,
en estas dos almas que con clamor,
pedían amor, sin suerte.
© Emely
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