No podía secar las lágrimas del olvido
como borrar sin llorar lo que se ha vivido
aunque la tierra árida germinará un florido
las frescas rosas olían al que se habia ido.
Una sola lágrima era un torrente
de pasiones tristes cuando no había suerte
con el primer amor que tenía nombre
ilusión y sueños por un hombre.
En las noches tristes sólo había sombras
no había claridad para ver el rastro
del que se fue dejando un corazón a oscuras
sólo brillaba un amor clavado en el centro.
Quería saber cual era el sendero
que lo alejó de este amor verdadero
que le regaló la ternura de un "te quiero"
y la doncellez de ser el primero.
Fue tan amado y tan adorado
pero este sentimiento debía ser callado
porque tenía un presente acorazonado
y el pasado nunca fue confesado.
Al llegar la luz todo estaba en calma
sólo eran emociones de mi juventud
que van y vienen porque soy humana
y estos versos quizas tengan muchos años.
"El amor que nunca se olvida es soledad que nos roba la vida"
® Emely
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